Hoy toca darse un homenaje con un doblete subidito de alcohol y lúpulos, dos cervezones que como la noche y el día estuvieron presentes por estas fechas en el AMCA del año pasado, tenemos Emelisse Black IPA y Emelisse Triple IPA.
Se elaboran en la holandesa Bierbrouwerij Emelisse, fundada en 2005 en la localidad de Kamperland donde el maestro cervecero Kees Bubberman saca al mercado unos 2.000 hectolitros anuales de cerveza. La cervecera dispone de un restaurante con muy buena pinta donde dicen que te acompañan los aromas a lúpulo y cebada de las cervezas recién elaboradas.
La Emelisse Black IPA en una Black IPA con una graduación alcohólica de 8%, 70 EBC y 80 EBU (Unidades Europeas de Amargor, escala similar a la IBU).
Tiene color negro con vivacidad media-baja con una espuma poco persistente de un color similar a la del café. El aroma nos lo esperábamos más lupulado pero es torrefacto, a pan tostado, chocolate, caramelo, toffee con matices a ciruelas y pasas. Lo mismo ocurre en el sabor con los mismos sabores maltosos a pan tostado, chocolate, toffee y fruta negra. El final del trago es muy amargo pero perfectamente integrado con la malta y ligeramente licoroso aportando calor que junto con la textura suave y el cuerpo medio-alto hacen de esta cerveza una delicia más cercana a las Imperial Stout que a una Black IPA.
La Emelisse Triple IPA En una Imperial IPA, que ellos califican como Triple IPA debido a la cantidad de lúpulo con un 10% de alcohol elaborada con levadura White Labs WLP 001 y lúpulos Chinook, Simcoe, Cascade y Amarillo que le dan a la cerveza un amargor de 103 EBU.
Tiene un color anaranjado con vivacidad tirando a baja que crea espuma color crema poco persistente. El aroma es muy dulce, a caramelo, con un fuerte carácter resinoso y a cáscara de cítricos. En boca tiene un sabor intenso y dulce que te llena la boca, con el mismo carácter a caramelo, resina y cítrico que teníamos en el aroma y un inmenso amargor final largísimo en el que la malta no se queda atrás enmascarando la alta graduación alcohólica que empieza a aparecer cuando calienta un poco. Rica cerveza, efocada a fanáticos de lúpulo, un pelín traicionera ya que si te descuidas entra sola.
Unas cinco raciones de lúpulo para dos birrotes, muy diferentes y perfectamente hechos, con los que disfrutar y darse un atracón en una fecha especial.