Este fin de semana estrené mi nuevo kit Mr. Malt comprado en Cervezorama con el extracto de Stout Coopers. He tenido varios fallos en el proceso, así que tendré que aprender de ellos para la próxima vez, solo esperemos que salga algo minimamente bebible.
El primer paso y aunque parezca mentira, el más importante, es la limpieza y esterilización de todo el material que vaya a entrar en contacto con la cerveza. Después de limpiar todo el material con agua caliente y detergente, es necesario proceder a la esterilización. Para ello se utiliza la solución incluida el kit, diluida en agua en las proporciones que indica en sus instrucciones. Se baña concienzudamente el fermentador, los utensilios y las ollas que se vayan a utilizar y se dejan secar sin aclarar.
Posteriormente se prepara el mosto, para ello, se quita la tapa, sacamos el sobre de levadura y precalentamos la lata a baño maría durante 10 minutos. Una vez calentada, vertemos el contenido en una olla con dos litros de agua hirviendo y un kilo de azúcar hasta homogeneizar, como se indica en las instrucciones del extracto de malta.
Otro paso importante es el enfriado del mosto, es necesario que se realice lo más rápido posible porque en este punto la cerveza puede contaminarse. Pensé que tardaría menos en enfriarse, sumergimos el exterior de la olla en agua con hielo y removimos fuertemente pero nos costó bastante bajar la temperatura hasta aproximadamente 35ºC. Es necesario utilizar una olla grande, con más de 5 litros de capacidad, porque en mi caso me quedé muy justo y no podía mover suficientemente el mosto. Para posteriores preparaciones tendré que buscar una forma más efectiva, empezando por cambiar de olla entre la cocción y el enfriado.
El siguiente paso es verter el mosto en el fermentador sobre 5 litros de agua fría. En este punto tuvimos un pequeño problema que obligó a fregar el suelo y a apuntarme que necesito comprar un embudo. Posteriormente hay que rellenar hasta la cantidad de litros de indica el extracto, en nuestro caso, añadimos menos debido a que torpemente se nos cayó un poco fuera del fermentador. Se remueve bien y medimos la densidad con la probeta y el densímetro, en nuestro caso salió 1042.
Alrededor de 25ºC, en nuestro caso algo menos, añadimos la levadura y mezclamos con ganas para airear el mosto todo lo posible. Colocamos el airlock en la tapa del fermentador y, aunque en las instrucciones indica que hay que rellenar con agua hasta la marca, en Cervezorama nos dijeron que tendría que ser con alcohol porque las bacterias atraviesan el agua y que él utilizaba ginebra. Haciendo caso a los expertos, utilizamos ginebra de una botella que teníamos por casa. Posteriormente se cierra y se presiona ligeramente el fermentador para comprobar que se mueve el líquido del airlock y no hay escapes de aire.
Ahora mismo lo tenemos fermentando, manteniendo un rango de temperatura entre 20ºC y 22ºC y el airlock está burbujeando constantemente. Ya os contaremos en unos días, en cuanto procedamos al embotellado, si ha salido bien. Personalmente me conformo con que el resultado final parezca y sepa a cerveza, aunque sea mala. Si esto sale bien me lanzaré en breve a hacer recetas con grano, porque esto del extracto no deja de parecerme un colacao fermentado.