Feria de la cerveza artesana en L´Europe

Por fin este pasado domingo y lunes se celebró la más que esperada 2ª feria de cerveza artesana en la Cervecería L´Europe. A pesar de levantarnos un poco perjudicados gracias a la divertida fiesta del día anterior de primer aniversario del Irreale, allí nos presentamos apenas media hora después de su apertura. Ya estaba bastante animado, y por supuesto, allí estaba Nicolás recibiendo a los asistentes con su eterna sonrisa.

Al llegar hicimos la obligada vuelta de reconocimiento, saludos pertinente, y decidimos empezar a visitar lo puestos por el final antes de que se llenasen. Los asistentes: Medina, Naparbier, Domus, La Cibeles, Milana, Les Clandestines (que se retiraron tras el primer día), Yria-Guinea Pigs, El Oso y el Cuervo, Almogaver, La Socarrada, Casasola, Sagra y La real del duero. Aparte de esto varios barriles especiales para la ocasión: Urtel, Anchor Porter, Punk Ipa…. Parecía complicado meter 13 stands en la cervecería, que a pesar de ser muy grande es alargada y dificultaría la distribución, pero allí estaban todos, perfectamente alineados cada uno en su sitio.

Muchos fuimos con miedo de que se llenase demasiado y fuese demasiado agobiante estar allí, pero quitando un rato el domingo por la tarde que se formaba un poco de aglomeración en la parte más estrecha de la barra, justo donde estaban El oso y el cuervo se estuvo muy bien allí. En la sala del fondo había un espacio un poco más amplio y contaba con bancos para sentarse un ratillo, por lo que era un saloncito perfecto para charlar un rato con Jesús Medina y los chicos de Naparbier, que siempre es agradable.

En cuanto a las cervezas, mi opinión personal y creo que compartida por muchos de los asistentes es que las grandes triunfadoras fueron la Imperial Ipa de Cervezas Medina y Oso negro de Cervezas el Oso y el Cuervo, que hicieron un primer lote más que notable y este han conseguido redondearlo con unos deliciosos matices a chocolate. Muy buenas críticas se llevó también La Real del Duero. Mención especial para mi querida Hopvana más ligera y sabrosa que la tirada anterior debido a la menor carga de lúpulo y a la Aker de Naparbier, esta no apta para todos los paladares debido a su intenso amargor, pero muy buena para los amantes del estilo.

Había comida variada y a precios asequibles para ir empapando, cosa de agradecer. Para la ocasión se tomó la acertada decisión de dejar aparcadas las famosas e inmensas bandejas típicas del bar, por platos más de picoteo que iban y venían por el local, mini hamburguesas, perritos, montaditos…. Nos comimos un perrito bastante rico y lo que se veía por ahí tenía bastante buena pinta.

Como casi siempre en las ferias, lo mejor el ambiente. Los anfitriones perfectos, Nicolas y su familia siempre amables, y agradecemos a sus camareros que no pararon de currar los dos días para que no nos faltara de nada. Un placer como siempre compartir charla y cervezas con blogueros, productores y aficionados en general.

Podéis ver más fotos del evento en nuestro Facebook.

Bodega la Ardosa en Madrid

En pleno barrio de Malasaña (Calle Colón 13) hay una bodega mítica de esas con encanto y con solera. Se trata de la bodega La Ardosa. Nosotros habíamos estado un par de veces (pocas porque es muy pequeño y siempre está lleno) pero el otro día al pasar por delante algo llamó nuestra atención: unos nuevos y brillantes carteles de BrewDog y The kernel. Obviamente entramos, y allí estaban, las Kernel en una de sus estanterías  junto a Lervig, Mikkeller, St. Peters y pinchada la Punk Ipa.

La Ardosa se fundo en 1892 y estuvo funcionando como bodega hasta 1979 cuando se hizo cargo de ella la familia que ahora la regenta y la orientó más a la cervecería, hasta ahora tenían Pilsner Urquel, Guinness y poco más. Fue Gregorio Monje el encargado de esta transformación y tras su fallecimiento en 1995 son sus hijos los que se encargan del negocio. Pero el aspecto más reconocido de esta bodega no son ni sus vinos ni sus cervezas, es la cocina de Concha Marfil, viuda de Gregorio, sus tortillas de patatas, salmorejos o croquetas se han llevado múltiples reconocimientos. Nosotros aún no hemos pedido nada de comer allí, pero lo haremos algún día y os lo contaremos.

El sitio es muy pequeño, con todo lo que se puede esperar de este tipo de establecimientos: cuadros, fotos, botellas antiguas en las estanterías… Entre todo ello destaca una curiosa pizarra del  «Record Guinness de La Ardosa» de los años 80, que muestra como ganador a un alemán que parece se bebió 14 pintas en 3 horas y 22 minutos

El local está dividido en dos pequeñas zonas, la primera, la de la barra con unas pocas mesas altas y taburetes, para estar de pie, y atravesando la barra, al fondo una pequeña salita con más mesas. En cuanto a los precios, pues es algo caro pero creo que es un sitio de esos que hay que visitar y conocer, ir al menos una vez a respirar un poco de historia de la ciudad. Está muy cerca del Irreale y de la Fábrica Maravillas, así que si estáis por la zona os recomiendo que entréis a tomar una Punk Ipa de barril (vale, a 5.50€ pero muy rica).

Os recomendamos visitar su página web para conocer un poco más de la historia de este local www.laardosa.com

Cervecería Freiburg en Barcelona

Nuestro viaje a Barcelona fue bastante fructífero en el aspecto cervecero. Ya os hemos hablado del 2D2Dspuma y del George and dragon y hoy lo haremos del Freiburg. Este local es visita obligada para todos los cerveceros que pasen por la ciudad condal. Está bastante alejado del centro, de hecho ya es Hospitalet pero muy cerquita del Camp Nou, así que me imagino que los días de partido será punto de encuentro para muchos cerveceros-futboleros.

Antiguamente el Freiburg era un pequeño bar de barrio, de hecho está justo delante de un mercado y han sabido reconvertirlo en una excelente cervecería pero sin perder ese punto de local de barrio frecuentado por trabajadores de la zona. A esto contribuyen sus camareros que llevan años sirviendo buenas cervezas y por lo que nos cuentan, son conocidos en toda la ciudad.

El Freiburg es un local pequeño, la decoración al igual que las mesas y los bancos es toda de madera, y las paredes están cubiertas de vitrinas y estanterías repletas de cervezas. La carta es muy amplia y a nosotros nos encanta que las cervezas disponibles estén a la vista para aparte de leer la carta, poder ver las botellas, las etiquetas… En ese aspecto nos encantó el sitio. En cuanto a los grifos, solamente dos rotatorios, cuando nosotros estuvimos tenían la Hopvana y una Mikkeller Barley wine, así que no hay queja. Tomamos varias, como la Grunge Ipa, la ZZ, la de De Molen Hel & Verdoemenis o una Rooie dop chica americana, es decir una amplia selección de más de 400 cervezas, dificil escoger.

También tienen bastante comida, abarcan desde el más típico menú cervecero, con frankfurts y bratswurs a lo más tradicional de la zona como butifarras o cervelas. He de decir que nos comimos unos bocadillos buenísimos (uno de lomo y otro de ternera creo recordar), creo que junto con el superbocata de Frankfurt y queso que tomamos en 2D2Dspuma fue lo mejor que comimos en todas las vacaciones en Barcelona.

Cervecería Freiburg

Calle Occident 12 bis

08903 Hospitalet de LLobregat

934405633 info@cerveceriafriburg.com http://www.cerveceriafreiburg.com/

George and Dragon en Barcelona

En nuestras vacaciones en Barcelona coincidimos con el día de La Diada, los lugareños nos recomendaron no ir mucho por el centro para evitar aglomeraciones, así que decidimos pasar la tarde en un lugar cercano al hotel, el George and Dragon. Cuando llegamos estaba un poco desbordado ya que la manifestación estaba pasando a escasos metros y estaba lleno de gente, todos ataviados con sus correspondientes banderas y pancartas. Enseguida pudimos hacernos con una mesa y empezamos a dar esos paseitos que tanto nos gustan a ver las pizarras y los grifos para ver si nos llevamos alguna grata sorpresa.

Y efectivamente así fue, en el George and Dragon tienen nada menos que 18 grifos de cerveza, y una amplia carta de botellas. Cuando estuvimos allí tenían pinchadas varias Rogue, Aktien, la Nómada Ultra Bitter, Naparbier, Slaapmutske y las catalanas Fort, Krut, Fullers y Agullons. Tiene la posibilidad de hacer un “tour cervecero”, es decir puedes probar todas las cervezas que tienen pinchadas, en un vaso de tamaño especial para ello y a un precio fijado. Nosotros estuvimos bastante tentados a hacerlo, pero finalmente pensamos que sería mejor dejarlo para otra ocasión.

El bar tiene forma de cueva con paredes blancas y columnas de ladrillo también en blanco. Las sillas y mesas son de madera, así como las escaleras, barandilla y algún otro elemento decorativo. Hemos hablado en alguna ocasión de la tendencia entre los nuevos locales de elegir una decoración sobria y austera (Como el Animal, Irreale, o Never Stop), en contraposición a las típicas cervecerías alemanas recargadas de madera, creo que el George and Dragon consigue un bonito equilibrio entre ambos estilos.

A la entrada se ve un pequeño tunel, tapado con cristal lleno y de botellas de Rogue, que data de la guerra civil y que, según nos contó el camarero, se usaba en aquella época para huidas entre edificios. Al fondo hay un pequeño escenario, en el que a veces hay actuaciones en directo, cuando nosotros estuvimos, había un proyector con videos musicales.

Tienen también carta de comida, sobre todo picoteo. Nos tomamos unos nachos muy picantes, una fuente enorme y a muy buen precio; muy ricos y bastante picantes, perfectos para acompañar las buenas cervezas que nos tomamos.

George and Dragon

Calle diputación 269, Barcelona. Metro Passeig de Gracia

http://www.georgeanddragonbcn.com

Cervecería Never Stop en San Sebastián

San Sebastián es una ciudad preciosa y como a nosotros eso de ir de cañitas y de pinchitos nos gusta más que a un niño un caramelo, pues allá que nos hemos ido de vacaciones.

Nos enteramos de que hace pocos meses han abierto una nueva cervecería y por supuesto fuimos a conocerla. Está en la calle Reyes Católicos número 6, una calle peatonal de una zona bastante comercial, justo detrás de la catedral. Al llegar nos sentamos en su pequeña terraza y lo primero que nos sorprendió fue su amplia carta de 6 barriles rotatorios y unas 120 referencias en botella. La carta un poco desordenada para mi gusto, pero bien elaborada y divertida. Los precios algo caros, pero bastante acorde con el resto de la ciudad. Empezamos con una Punk Ipa de barril.

Después de un ratito en la terraza y ver como varias personas se sentaban y se iban al ver que no tenían ni café ni Mahou, comenzó a llover (si, mientras algunos estabais a 40 grados en la feria de Noblejas nosotros tuvimos unas vacaciones pasadas por agua)  y nos fuimos dentro. El interior es pequeño, con una decoración sobria y elegante.

Allí disfrutamos de una agradable charla con unos de los dueños que nos hablaba de lo complicado que es sacar a los lugareños de sus vinos, sidras y “zuritos” (por cierto en casi todos los sitios keller) pero poco a poco la gente se va animando.

 He de decir que “cazamos” una errata en la carta y yo pedí lo que pensaba que iba a ser una imperial ipa con dryhopping y me acabé tomando una bomba de cerveza ahumada de De Molen. No estuvo mal el cambio.

Nos ofrcieron hacernos una ficha de cliente, tienen un cuaderno con una hoja por cada cliente habitual con el listado de cervezas, así cada uno va marcando las que prueba y que le parece. Como una especie de Untappd pero en papel. No la hicimos ya que estabamos de paso, pero me puedo imaginar que tendríamos buenos piques si pudiesemos ser clientes habituales.

En definitiva es casi obligado un viajecito a San Sebastián a conocer la ciudad y si estáis por allí, pasaros por esta estupenda cervecería, Never Stop para tomar una buena cerveza entre pincho y pincho.