Ya que se acercan las navidades que son fechas en los que no paramos de reunirnos con amigos y familia y a veces acabamos un poco saturados de cocinar, beber y comer, os doy esta receta de un postre que se hace rapidísimo (no creo que sean más de 15 minutos) y es bastante “light” o por lo menos es mucho menos contundente que la mayoría de los postres que tomamos estos días.
Ingredientes
Galletas, mantequilla, yogur tipo griego, queso de untar (venga, el philadelphia de toda la vida, yo uso el light), frutas del bosque congeladas, azúcar, agar agar, cerveza de fruta, en este caso una mort subite de frambuesa.
El agar agar es un espesante natural a base de algas, nunca he usado las hojas de gelatina y no las controlo mucho, pero supongo que servirá igual.
Picamos las galletas las mezclamos con la mantequilla derretida hasta que se haga una pasta homogénea y las ponemos en el fondo del molde como base.
Ponemos a cocer hasta que reduzca a la mitad las frutas ya descongeladas, junto con el jugo que sueltan, azúcar, media cerveza y una cucharadita de agar agar (no hay que poner mucho, se trata de la tarta se mantenga en pie, no de que quede dura). Mezclamos el queso y el yogur (la proporción que yo hago es mas o menos dos yogures por media tarrina grande de queso, pero como siempre a gustos) incorporamos la mitad de las frutas y del líquido que tenemos en el cazo y ponemos la mezcla en el molde encima de las galletas. Finalmente lo cubrimos cuidadosamente con las frutas que nos quedan, la dejamos que se enfríe en la nevera y …¡lista!
Se que os encantan las tartas llenas de bizcocho y chocolate como la que hicimos para el aniversario, pero esta es sencillísima y el resultado inmejorable ¡Qué aproveche!